El mundo en el que vivimos es diverso por naturaleza, desde el inmenso espacio exterior en el que existen diferentes tipos de elementos espaciales: planetas, estrellas, asteroides… hasta el más minúsculo ecosistema que pueda haber en nuestro planeta en el que pueden convivir diferentes tipos de seres vivos.
Por lo tanto nosotras, las personas, como seres vivos que estamos dentro de toda esa amplia gama de colores somos, por definición, diversas.
Sin embargo, las diferentes culturas que llevan existiendo desde hace siglos en nuestro mundo y cuya ideología se ha impuesto con base en el miedo han ido socavando y destruyendo la diversidad que nos caracteriza por el odio que sienten hacia lo que es diferente.
Ese odio se ha materializado en diferentes tipos de acoso, en unas épocas de forma más terrible y sanguinaria que en otras, pero que a pesar de los avances que la humanidad ha ido dando en la consecución de los Derechos Humanos aún hoy existe hacia los grupos que son diferentes y diversos.
Acoso que se ha llevado a todos los ámbitos en los que el ser humano se mueve: social, laboral, educativo…
Hoy, 2 de mayo, nos manifestamos contra uno de dichos acosos: el que se produce en los centros educativos contra el alumnado que lo sufre de un modo u otro y por circunstancias diversas. (De nuevo aparece la palabra diversa porque es algo inherente al ser humano).
El acoso escolar es una gran amenaza contra el Derecho a la Educación y que requiere de una intervención específica y urgente.
Además, dentro de ese alumnado al que nos hemos referido antes existe un grupo cuyas características les hace más vulnerables porque su familia, las personas que conviven en su casa, incluso ellos mismos, no pertenece al modelo clásico que tradicionalmente se nos ha impuesto como único y verdadero.
Nuestres hijes sufren al ver que lo que elles viven en sus casas y con lo que son felices no se corresponde con lo que se enseña en las escuelas por lo que se les expone a una situación en la que pueden sufrir comentarios y actos despectivos por parte de sus iguales.
Por todo lo expuesto desde las Asociaciones con familias diversas exigimos a las autoridades competentes que se involucren al máximo y hagan las modificaciones oportunas tanto en los libros de texto como en formularios y documentos oficiales para que aparezca esta diversidad familiar que día a día inunda, llena y completa de forma sana y natural el mundo y la sociedad en la que vivimos.