Las familias siguen cambiando y adoptando nuevas formas. Los matrimonios gays han dado visibilidad a una manera de ser padres que lleva 20 años practicándose en España, pero que se había ocultado y ha causado un «limbo» jurídico para muchos niños: la subrogación. Sus protagonistas nos cuentan tres historias que pueden sorprender.
«En invierno somos adictos a la chimenea. La encendemos, tendemos una alfombra alrededor, entre los dos sofás, y ahí hacemos la vida; los fines de semana es que ni nos movemos de ahí los cinco, haciendo nuestras cosas: las niñas, sus deberes; el niño, subido a la mesa, bailando, jugando. Es lo que buscábamos. Y cómo lo disfrutamos». Esa imagen de hogar la describe Marcos Rodríguez, sevillano, de 43 años, informático, que mantiene desde hace 27 años una relación con Manuel López, de 50 años, administrativo, nacido en Jerez de la Frontera. Se casaron en octubre de 2005, pocos meses después de aprobarse la ley que permitió en España el matrimonio entre dos personas del mismo sexo. Tienen dos niñas mellizas, Julia y Lucía, de siete años, y un niño, Manuel, de dos. Viven en una agradable casa con jardín en Aznalcázar, a 30 kilómetros de Sevilla.»
«Soy periodista, y gracias a mi trabajo he estado siempre haciendo viajes interesantes y conociendo a gente interesante. Pero, no sé, hace tres o cuatro años llegó un momento en el que lo que más me apetecía era disfrutar de la casa con mi marido. Empecé a darme cuenta de que la vida que llevaba, aunque muy alegre y divertida, no me conducía hacia la felicidad de verdad. En vez de en el Ritz, quería dormir en mi cama con mi marido. Nosotros somos siete hermanos; Óscar son cuatro. Quizá por esa atmósfera familiar en la que nos criamos, echamos de menos que pasen más cosas en casa». Habla Andrew Ferren, periodista, de 46 años, que colabora con publicaciones como The New York Times, nacido en Nueva Jersey (EE UU) y que reside en Madrid desde 2002. Hace seis años conoció a Óscar (en realidad, su marido tiene otro nombre, pero es un alto ejecutivo de banca, y teme que salir del anonimato en este caso no sea bien visto por su empresa), español, de 33 años; se casaron en el verano de 2008. Esperan mellizos. Nacerán al comenzar el otoño en Minnesota (EE UU).
Son tres historias de padres orgullosos que subrayan la evolución que sigue experimentando el concepto de familia hasta acoger múltiples opciones. La clave aquí es olvidarse de cualquier prejuicio. De cualquiera.
Las familias de Andrew y Óscar, Marcos y Manuel, Pedro y Javier, han sacado además a flote una realidad que lleva 20 años introducida en España, aunque sin apenas reconocimiento social, legal ni mediático: la gestación subrogada.